La periodista y presentadora de televisión británica Ulrika Jonsson en uno de sus artículos habló sobre su adicción a las quemaduras solares y declaró que estaba lista para morir por el sol. El material relevante fue publicado por The Sun.
Según Jonsson, está acostumbrada a tomar el sol regularmente con sus hijos. Así que cuando la presentadora de televisión se mudó de Suecia al Reino Unido en 1979, quedó atónita por la gente "pálida e incolora" del país.
En el artículo, la periodista de 52 años habló sobre su amor por el bronceado. Sin embargo, reconoció que la exposición frecuente a los rayos ultravioleta causa un daño significativo a la salud.
“El sol es mi droga y no hay duda de que moriré a causa de él”, dijo.
La celebridad también admitió que fue criticada más de una vez en su cuenta de Instagram por los suscriptores debido a su adicción. Los internautas condenaron a Jonsson por su hábito de broncearse, argumentando que la presentadora de televisión envejecería prematuramente y, además, arruinaría su piel.
Sin embargo, Jonsson, nacida en Suecia, dijo que solía envidiar a las personas de piel oscura, pero ahora "el sol está en su ADN".
En mayo, Lauren Coathup, de 27 años, del Reino Unido, se volvió adicta al bronceado y casi perdió la mitad de la nariz. Todo comenzó cuando, en enero de 2018, después de unas vacaciones en la playa, una mujer notó una pequeña zona de piel oscura en la fosa nasal derecha. Algún tiempo después, Kotap fue al hospital, donde le diagnosticaron cáncer de piel. Tuvo que someterse a una operación, como resultado de lo cual los médicos lograron extirpar las células afectadas.
